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jueves, 2 de noviembre de 2017

MARGARITA PORETE Quemada viva por la Inquisición por su amor a Dios

MARGARITA PORETE Quemada viva por la Inquisición por su amor a Dios

MARGARITA PORETE Quemada viva por la Inquisición por su amor a Dios
Margarita Porete, o Marguerite Porrette, o la Porette, fue una mística francesa de la corriente de las beguinas, autora de El espejo de las almas simples, libro de mística cristiana centrado en la noción del amor divino
No sabemos casi nada de su vida, pero lo poco que sabemos revela una mujer extraordinaria.
Margarita Porete fue una joven beguina nacida a mediados del siglo XIII que dedicó su vida a escribir sobre el amor totalmente desinteresado hacia Dios. Margarita se unía a una de las corrientes místicas medievales que se basaba en un diálogo directo con Dios y en una exaltación de su amor sin condiciones. 

El 1 junio de 1310, en la plaza de Grève de París, donde actualmente está el Ayuntamiento, era quemada en la hoguera una joven beguina acusada de haber escrito y difundido mensajes heréticos.
MARGARITA PORETE Quemada viva por la Inquisición por su amor a Dios
Todos sus pensamientos, sentimientos y experiencias místicas los plasmó en un libro titulado El Espejo de las Almas Simples.

Con reflexiones profundas puestas en boca del Amor, el Alma o la Razón, Margarita ahondaba en la necesidad de dejarlo todo y no esperar nada en su camino de perfección.
MARGARITA PORETE Quemada viva por la Inquisición por su amor a Dios
En sus propias palabras: El Alma, convertida en nada, sabe todo y no sabe nada.

Las palabras de Margarita la llevarían primero a la excomunión y más tarde a la hoguera de la Inquisición. En su convencimiento de no estar cometiendo ningún acto contrario a la ortodoxia religiosa, Margarita desestimó las oportunidades que se le brindaron para retractarse de sus propias palabras, a las que fue fiel hasta su muerte.

En 1306, el obispo de Cambrai, Guido II, hacía quemar en la plaza pública de Valenciennes el Espejo, lo que suponía su prohibición bajo pena de excomunión. Más tarde fue la propia Margarita la que fue perseguida. Permaneció un año y medio en prisión. Durante este tiempo en que continuó creyendo en su inocencia, se negó a comparecer ante un tribunal eclesiástico.

A pesar de que algunos clérigos defendieron a Margarita, nada se pudo hacer para que en 1310 fuera entregada al brazo secular de la Inquisición quien la condenó a morir quemada viva, sentencia que se cumplía poco tiempo después.

Tras la condena y ejecución de Margarita, su libro no desapareció. Durante mucho tiempo aparecieron copias por distintos lugares de Europa sin apuntar su autoría. Tuvieron que pasar más de seis siglos para que en 1946 se identificara a Margarita como la autora de uno de los libros místicos más importantes de la Edad Media.